Carta de arrepentimiento

Yo, una imbécil.

Imbécil!
Y tu, el cabrón que me hiciste serlo.

No quiero mas sonrisas de cartón, que por tu parte, son amargas y maliciosas.
Hace ya tanto tiempo que creo conocerte, pero cada día que se pone la luna, sale el sol y me doy cuenta que solo se como te llamas porque escuché tu nombre en boca de otras.

Cerdas princesitas que como yo, se han sentido queridas y mas tarde, desconsoladas.
Es deprimente. Inconsciente ser que solo desea su placer por puro egoísmo.

Crees que soy maleable, que siempre vas a poder utilizarme a tu favor, que en mí siempre encontraras una diversión, pero te equivocas.
Aprendo, dejo de amarte inútilmente,y dejas de ser mi melodía para ser una alteración más.

Es satisfactorio escribir sobre tu vida, o por lo menos, sobre la vida que me has hecho conocer.
Cuando conversamos, nos odiamos y yo, dejo todo para volver a sentirte mas cerca.
Nunca lo consigo.
Es por eso que quiero escribirte. Esta hoja se que no me reprochara nada, que me perdonará solo si escribo una línea más. Y me pide que la tinte, que la llene de amor.
Tu solo pides placer. Y le he sido infiel, solo porque te quería, porque creía que nos queríamos.
Pero ya nunca más!

Derrochas energía. Se que eres una fachada y eso te hace repugnante.